Salmo 139:13 (NVI)

    “Porque tú formaste mis entrañas; tú me formaste en el vientre de mi madre”.

Esta semana es el Día de la Madre. Donde celebramos y aprovechamos este día para demostrarle a nuestras madres lo que significan para nosotros. Ahora bien, no digo que este tipo de cosas no puedan ocurrir otro día, y debes mostrarle a tu madre la atención y los mimos que se merecen siempre que puedas. Este día es mostrar la importancia de una madre en nuestras vidas o incluso una figura materna. Dios nos ha dado a cada uno una madre que fue hecha especialmente para nosotros, para poder ser todo lo que necesitamos de ellos. 

Juan 16:21 (NVI)

    "Cuando una mujer está dando a luz, tiene tristeza porque ha llegado su hora, pero cuando ha dado a luz al niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que ha nacido un ser humano en el mundo". 

Nuestras madres pasaron luchas y obstáculos por el mejor vivir que nos pueden dar, aguantaron tanto para que no tuviéramos que sufrir porque ella ya tiene como Dios siempre ha hecho por nosotros. De cualquier manera que te haya traído a la familia nacimiento, cesárea, adopción, acogida, etc., Dios la ha puesto como tu madre con un propósito. 

Proverbios 1:8 (NVI)

"Escucha, hijo mío, la instrucción de tu padre, y no abandones la enseñanza de tu madre",

Éxodo 20:12 (NVI)

“Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que el Señor tu Dios te da”

Como madre, no solo están aquí para cuidarte, amarte y mimarte, sino también para disciplinarte, enseñarte y guiarte. Cuando miras hacia atrás y recuerdas los argumentos, los fundamentos, los no y más entiendes que vienen de un lugar un amor, para protegerte del daño y el peligro, para enseñarte lecciones importantes que no te quiten la alegría. Así que honra a tu madre y tómate el tiempo para demostrarle que la amas.